Vuelve el futbol. España se queda fuera de esa final del
torneo este de reciente creación, y vuelven los partidos de la liga.
Se acaban durante unas semanas los fichajes del verano, la
persecución a Dembelé y las vueltas de Neymar, de quien todos sabemos que por
mucho que se empeñen los amigos, no va a venir.
Descansaremos de portadas con De Ligt, Rabiot, De Jong y
Mbappé. Y volveremos a hablar de goles, de Messi o Suarez, de victorias o de
disgustos, pero con el balón de por medio.
Y este sábado visitamos el Wanda, ante el gran rival
rojiblanco, y no estaría de mas que nos centráramos en el partidazo. Que el
Atleti quiere ponerse líder a costa nuestra, y que los blancos, jugando a lo
que juegan, han encontrado el camino de los tres palos, y ahora los meten hasta
de rebote.
La baja de Rakitic es dolorosa, y sustituirlo será muy
complicado, aunque este año la única forma de que alguien descanse es con
lesión de por medio, dada la nula capacidad de Valverde en rotar, y de aquellos
barros estos lodos, tenemos a medio equipo titular rindiendo por debajo de su
nivel, y a los suplentes sumidos en su ostracismo personal y compartido.
En resumen una jornada en la que de ganar pondríamos
distancia ante uno de los rivales, y de perder, todo estaría en un puño, y
nosotros a un centímetro de una nueva crisis que ya no taparían con las
noticias de Dembelé y los fichajes inventados.
Y en otro orden de cosas, parece que se confirma que Modric
es el nuevo balón de oro y que en el podio no están ni Messi ni Griezzman ni el sempiterno Cristiano(dejó de recibir premios desde su marcha del Madrid), pero
estará Varanne.
Esta vez se les ha ido la mano, y mas que el balón de oro
parece que están con los premios Real Madrid TV
Y pensar que un dia France Football fue un periódico serio y
algunos nos quedábamos a ver la ceremonia.